China ha presentado una demanda contra Estados Unidos ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) por los "aranceles recíprocos" que afectan a todos sus socios comerciales, incluido el país asiático.

InfoStockMX - El Ministerio de Comercio chino denunció que estas medidas "violan gravemente las normas de la OMC, dañan los derechos legítimos de sus miembros y socavan el sistema de comercio multilateral". Pekín calificó la medida como "una práctica de intimidación unilateral" que compromete la estabilidad económica global.

La respuesta de China no se hizo esperar. Pekín anunció aranceles del 34% sobre las importaciones estadounidenses como contramedida a los gravámenes impuestos por Washington. Este endurecimiento de las tensiones comerciales provocó caídas significativas en los mercados bursátiles mundiales.

El mecanismo de solución de disputas de la OMC otorga un plazo de 60 días para negociaciones bilaterales. Pasado ese tiempo, China podría solicitar la conformación de un comité de expertos. No obstante, el proceso podría extenderse indefinidamente debido a la parálisis del Órgano de Apelación de la OMC, inoperante por la negativa de Estados Unidos a nombrar jueces desde 2019.

El conflicto escaló aún más con el anuncio de Pekín de imponer controles de exportación sobre elementos estratégicos de tierras raras, esenciales para la industria tecnológica global. Entre ellos figuran el gadolinio, utilizado en resonancias magnéticas, y el itrio, clave en la fabricación de dispositivos electrónicos.

Los mercados reaccionaron de inmediato. Hacia las 10:35 GMT, la bolsa de Londres cayó un 3,48%, Fráncfort un 4,46% y París un 3,83%. En Asia, Tokio cerró con una pérdida del 2,75%, mientras que Seúl cedió un 0,86%. En Wall Street, el índice Nasdaq perdió un 5,97% y el S&P 500 un 4,84%.

"La incertidumbre es mayor que nunca", subrayaron analistas de Tokai Tokyo Securities. Sin embargo, Donald Trump minimizó el impacto: "Los mercados tendrán un boom", aseguró.

La política proteccionista de Trump se traduce en aranceles de al menos un 10% a las importaciones globales, con tasas diferenciadas para ciertos países. La OMC advierte que estas medidas podrían reducir el comercio mundial de mercancías en un 1% durante el año.

Los países latinoamericanos no escapan a estas tarifas. Brasil, Colombia, Argentina, Chile y otros enfrentan un 10% de gravamen, salvo Nicaragua, con un 18%. En contraste, México y Canadá, pese a su relación en el T-MEC, seguirán sujetos a aranceles del 25%, salvo excepciones contempladas en el tratado.

En este escenario, los automóviles importados también recibirán un recargo del 25%, afectando a México, cuyo alivio es relativo. "Eso es bueno para el país", expresó la presidenta Claudia Sheinbaum. Sin embargo, Canadá advirtió que responderá con tarifas aduaneras del 25% a ciertos vehículos estadounidenses.

El acero y el aluminio tampoco se salvan de las restricciones comerciales, en una escalada de tensiones que pone en jaque el orden económico mundial.