Agentes de seguridad inhabilitaron 168 artefactos explosivos improvisados en Buenavista, Michoacán. La operación evidenció la amenaza constante del uso de drones con carga explosiva en la región.

Buenavista, Michoacán.- En un operativo de alto riesgo, fuerzas federales y estatales aseguraron e inhabilitaron 168 explosivos improvisados en el poblado de Paredes del Ahogado, municipio de Buenavista, Michoacán. La intervención no solo desactivó el arsenal, sino que también reveló un patrón que se ha venido presentando: el uso sistemático de drones armados por parte de grupos delictivos en zonas rurales de la Tierra Caliente.

Durante recorridos preventivos en caminos de terracería, el personal de la Guardia Civil, el Ejército Mexicano y la Guardia Nacional localizó más de un centenar de artefactos explosivos listos para ser lanzados desde vehículos aéreos no tripulados. Estos dispositivos fueron recogidos y neutralizados tras el establecimiento de perímetros de seguridad.

La desactivación estuvo a cargo del Grupo de Respuesta a Emergencias (GRE) de la Secretaría de la Defensa Nacional, en coordinación con el Agrupamiento Especializado en Artefactos Explosivos y Materiales Peligrosos de la Guardia Civil. El trabajo conjunto evidenció el grado de profesionalización en la elaboración de estos dispositivos caseros.

Además de los explosivos, se aseguraron tres kilos de pólvora aluminizada y un kilo de clorato de potasio, sustancia clave en la fabricación de explosivos de tipo artesanal o pirotécnico. El hallazgo refuerza la hipótesis de que la célula delictiva tenía capacidades operativas para continuar sus ataques a distancia.

Gracias a los sistemas de inteligencia y contramedidas tecnológicas de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), se logró la neutralización de dos vuelos de drones en tiempo real. Las autoridades suponen que estos aparatos pertenecían a un grupo criminal que opera en la zona.

La acción conjunta entre fuerzas estatales y castrenses confirma que, aunque se logran avances tácticos, la amenaza persiste. La región de Tierra Caliente sigue siendo un campo de batalla con tácticas terroristas donde la “innovación” delictiva desafía diariamente la capacidad del Estado.