El pollo se encarece 10.62% en un solo mes mientras la inflación crece. Un análisis de los datos oficiales del INEGI revela la magnitud de un severo problema alimentario en evolución.
Mexconomy - México asoma un problema inflacionario que está desequilibrando la economía familiar, con el pollo aumentando 10.62% en mayo y una inflación anual del 4.42% que se mantiene obstinadamente por encima del objetivo gubernamental, son datos del informe más recientes del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC).
Los alimentos básicos presionan a las cocinas mexicanas. Los productos pecuarios registran una inflación anual del 10.85%, mientras que la carne de res subió 1.78% solo en mayo. El jitomate, ingrediente esencial de la gastronomía mexicana, se disparó 10.03% en un mes.
"Las familias mexicanas están siendo exprimidas", advierte el análisis de los datos del INEGI. La situación es tan grave que el pollo tiene la mayor incidencia inflacionaria del país con 0.185 puntos porcentuales, seguido del jitomate con 0.049 puntos.
"Estamos ante una crisis alimentaria que golpea directamente la mesa de los mexicanos. Los datos no mienten: la proteína animal se ha vuelto un lujo."
En este contexto económico, México no sólo enfrenta una crisis inflacionaria, sino una fragmentación territorial de precios. Mientras Tabasco sufre una inflación del 1.06%, Sonora experimenta una deflación del -2.89%, creando un diferencial de 3.95 puntos porcentuales que refleja un país económicamente dividido.
Las cifras son más contrastantes a nivel municipal:
- Tehuantepec, Oaxaca: +1.20%
- Villahermosa, Tabasco: +1.06%
- Pachuca, Hidalgo: +1.05%
Versus:
- Esperanza, Sonora: -3.12%
- Hermosillo, Sonora: -2.86%
- Mexicali, Baja California: -2.69%
Esta disparidad revela un mercado nacional fragmentado donde las políticas públicas han perdido efectividad y la distribución de bienes presenta severas distorsiones.
La inflación de 4.42% anual representa un fracaso rotundo de la política monetaria mexicana. El Banco de México mantiene un objetivo de 3% ±1%, pero la realidad supera consistentemente esta meta.
Más preocupante aún: la inflación subyacente alcanza 4.06%, demostrando que las presiones no son temporales sino estructurales y persistentes. Esto significa que los aumentos de precios se han arraigado en la economía mexicana.
Los datos revelan sectores específicos con problemas severos:
Restaurantes y Turismo
Los restaurantes y servicios de alojamiento enfrentan una inflación anual del 7.41%, la más alta entre todas las categorías. Simultáneamente, el transporte aéreo colapsó -7.58% y los servicios turísticos en paquete cayeron -7.58%, revelando un sector turístico en crisis profunda.
Educación y Salud
Los servicios educativos aumentaron 5.85% anual mientras que la salud subió 4.79%, poniendo en riesgo el acceso a derechos fundamentales.
La electricidad cayó -18.45% en mayo debido a ajustes en las tarifas eléctricas por temporada cálida en 11 ciudades. Sin embargo, esta medida artificial no logra ocultar la volatilidad extrema del sector energético, que registró una inflación anual de 3.50%.
Los datos más alarmantes provienen del Índice de Precios al Consumidor de la Canasta de Consumo Mínimo (IPCCCM), que aumentó 4.37% anual. Esto significa que los productos más básicos para la supervivencia se han encarecido por encima de la inflación general.
Las familias de menores ingresos son las más golpeadas, enfrentando aumentos desproporcionados en:
- Alimentos y bebidas no alcohólicas: +5.08% anual
- Cuidado personal y protección social: +4.94% anual
- Salud: +4.79% anual
Los datos del INEGI para mayo 2025 pintan un panorama difícil para las familias: México enfrenta una crisis inflacionaria multidimensional que combina:
- Crisis alimentaria severa con aumentos descontrolados en proteínas básicas
- Fragmentación territorial que evidencia la pérdida de cohesión del mercado nacional
- Colapso de la política monetaria y pérdida de credibilidad institucional
- Deterioro acelerado del poder adquisitivo de las familias más vulnerables
La próxima publicación será el 9 de julio de 2025, fecha en que se conocerán los datos de junio y se confirmará si México logra controlar esta espiral inflacionaria o si, por el contrario, el problema de los precios se profundiza aún más.
Análisis de Mexconomy, basado en datos oficiales del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), Índice Nacional de Precios al Consumidor, mayo 2025.
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