El paro laboral que comenzó el pasado jueves 29 de mayo en los juzgados familiares se ha extendido este jueves a otras sedes del Poder Judicial de la Ciudad de México (PJCDMX), alcanzando también juzgados en materias civil y penal.
CIUDAD DE MÉXICO — Hoy no se celebraron audiencias penales, lo que agrava la crisis judicial y afecta directamente a las personas privadas de su libertad, quienes siguen esperando una resolución que no llega. “Esto no solo retrasa procesos, sino que lastima el principio de justicia pronta y expedita”, lamentaron familiares y abogados a las afueras de los juzgados penales en la colonia Doctores.
El conflicto laboral estalló tras la negativa de las autoridades judiciales a cubrir un incremento salarial que, según los trabajadores, debía haberse pagado desde enero de 2025. Los empleados exigen un aumento del 9% en salario y prestaciones, mientras que la propuesta oficial contempla apenas un 5% y $100 en vales de despensa, lo que consideran insuficiente ante las cargas laborales excesivas y los bajos sueldos.
“Para que vean que no les miento, ahí está el tabulador de salarios”, escribió una trabajadora en redes sociales. “El administrativo —o esclavo, como mejor lo conozcan— gana la flamante cantidad de $14,963 pesos, claro, con los descuentos de ley se traduce a aproximadamente $6,600 pesos a la quincena. Entonces no, no es en vano nuestro enojo y nuestras exigencias, porque además de todas las carencias que existen en el Poder Judicial CDMX, la carencia económica es gravísima”.
Desde la sede de Plaza Juárez 8, donde permanecen paralizados juzgados, salas y unidades de gestión, el paro laboral se ha replicado en las instalaciones de la Ciudad Judicial, localizadas en avenida Niños Héroes (colonia Doctores), en los juzgados de arrendamiento en calle Claudio Bernard y Doctor Jiménez, así como en la torre de unidades de gestión en materia civil en avenida Patriotismo.
El presidente del Poder Judicial capitalino, Rafael Guerra Álvarez, entabló un diálogo con los paristas, quienes exigieron el pago inmediato del aumento salarial y el bono de $7,100 pesos prometidos al personal de juzgados familiares y unidades de gestión judicial. Sin embargo, el magistrado presidente respondió que los pagos se realizarán hasta la siguiente fecha de pago a los trabajadores, sin dar una solución inmediata.
Mientras tanto, el paro se sostiene y amenaza con prolongarse, afectando no solo a los procesos judiciales civiles y familiares, sino también —y ahora de forma más alarmante— al ámbito penal, donde la justicia para cientos de personas privadas de su libertad pende de un hilo (judicial).
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