La economía poblana enfrenta un panorama complejo. El dinamismo en algunos sectores contrasta con preocupantes señales de desaceleración y pérdida de peso específico en segmentos punta, especialmente aquellos ligados a la manufactura y los servicios de exportación.
Puebla de Zaragoza (Mexconomy) - Puebla ha salido del "top" de la manufactura y los servicios de exportación, de acuerdo con las cifras oficiales. El programa de la Industria Manufacturera, Maquiladora y de Servicios de Exportación (IMMEX) es un termómetro crucial para la salud exportadora de una entidad. Los datos de abril de 2025 son contundentes: las principales entidades federativas en cuanto a concentración de personal ocupado en el programa IMMEX son Nuevo León (12.8%), Chihuahua (12.3%), Baja California (12.0%), Coahuila (8.7%), Tamaulipas (7.5%) y Jalisco (7.0%).
Puebla, notablemente, ya no figura en esta lista de líderes manufactureros regionales. Esta ausencia no es un dato menor. La entidad ha cedido terreno significativo frente a otros estados que han consolidado su vocación exportadora y maquiladora.
A nivel nacional, el personal ocupado en los establecimientos IMMEX descendió un 0.6% a tasa mensual en abril de 2025, y un 1.3% a tasa anual. Los establecimientos manufactureros, que constituyen la mayor parte de este programa (5,229 de 6,546 en abril de 2025), experimentaron un retroceso del 0.8% mensual y 1.8% anual en personal ocupado. Particularmente alarmante es la caída del 9.9% en el personal subcontratado en el sector manufacturero a tasa anual. Si bien estas son cifras nacionales, en Puebla la caída del empleo IMMEX es superior al promedio nacional.
El Indicador Mensual de la Actividad Industrial por Entidad Federativa (IMAIEF) para febrero de 2025 refuerza las preocupaciones. La actividad industrial de Puebla, en cifras desestacionalizadas, mostró un retroceso del 1.0% a tasa mensual y una disminución del 3.7% a tasa anual.
El foco de alarma se intensifica al desagregar por sectores: la industria manufacturera poblana registró una variación anual negativa del 12.5% en febrero de 2025. Esto significa que el corazón productivo de la entidad, históricamente ligado a la manufactura, está experimentando una contracción considerable, contribuyendo negativamente en un -0.53 al total nacional de la actividad industrial. Este declive en la manufactura es un golpe directo a uno de los pilares tradicionales de la economía de Puebla.
En contraste con la manufactura, el sector de la Construcción en Puebla mostró un incremento notable del 14.5% a tasa anual en febrero de 2025, siendo uno de los estados con mayores alzas en este rubro. Sin embargo, esta expansión se refiere principalmente a proyectos de infraestructura e inversión privada. Pero la fortaleza de la construcción, por sí sola, no compensa la desaceleración y la pérdida de relevancia en la manufactura y los servicios de exportación.
Los datos oficiales dibujan el panorama de una Puebla que ha perdido su lugar predominante en la geografía del empleo IMMEX y que, más allá de impulsos específicos como la construcción, enfrenta una contracción significativa en su sector manufacturero principal (sector automotriz).
Si bien la economía de Puebla es diversa, la debilidad en la manufactura y la ausencia en el "top" de la IMMEX son señales de que el "motor económico" en estos segmentos críticos "comienza a fallar". Para revertir esta tendencia, Puebla necesitará estrategias robustas para reactivar su industria manufacturera y atraer nuevas inversiones. Nada de esto se ve. En el corto plazo la sombra de la desaceleración amenaza con extenderse más allá de las estadísticas, impactando a empresas locales y familias, principalmente.
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