La noche del sábado se tiñó de rojo en las calles del puerto. Nueve personas asesinadas, dos taxis incendiados, un vehículo con un artefacto explosivo improvisado y, como clímax de la violencia, un camión urbano fue incendiado con cinco personas en su interior en plena avenida Ruiz Cortines, a la altura de la colonia La Laja.
Acapulco, Guerrero. – El horror se materializó cuando civiles armados prendieron fuego a una unidad de transporte público mientras ésta aún tenía pasajeros. La cifra de víctimas mortales: cinco personas calcinadas.
A pesar de la magnitud del hecho, la presidenta municipal, Abelina López, no ha emitido ningún comunicado al respecto. Su silencio contrasta con la desesperación de una ciudadanía cada vez más expuesta a la impunidad con la que operan los grupos delictivos.
Durante la misma jornada, además del ataque al camión, se registraron otros actos violentos: el hallazgo de un coche con explosivos improvisados y el incendio de dos taxis. La ciudad, otrora joya turística del Pacífico mexicano, parece ahora atrapada en un escenario de guerra no declarada, donde los civiles son las principales víctimas.
Elementos de seguridad y de la Fiscalía de Guerrero, acudieron al sitio del incendio del camiòn de pasajeros solo para acordonar la zona y levantar los cuerpos.
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