En entrevista con el periodista español Juan Luis Cebrián para *The Objective*, el expresidente Ernesto Zedillo acusó a Andrés Manuel López Obrador de haber destruido la democracia mexicana, con el respaldo de Claudia Sheinbaum. Señaló que Morena ha convertido al país en un régimen autoritario disfrazado de democracia.
CDMX — El exmandatario Ernesto Zedillo, quien gobernó México bajo las siglas del PRI, nuevamente rompió su prolongado silencio político para polemizar contra los gobiernos de la Cuarta Transformación. En la conversación con Juan Luis Cebrián, afirmó que el expresidente Andrés Manuel López Obrador consumó “la destrucción de la democracia mexicana” y que en ese proceso contó con la “complicidad abierta” de la actual presidenta Claudia Sheinbaum.
“Durante muchos años, desde que dejé de ser presidente, tenía el propósito de no opinar sobre asuntos políticos de mi país. La única razón que me haría volver sería ver a la democracia amenazada. Desgraciadamente, esa amenaza se materializó más allá de mis peores pesadillas”, declaró. Según su análisis, al final del sexenio de López Obrador se ejecutó un plan para desmantelar el sistema democrático en México.
Zedillo acusó directamente a Morena de propiciar la demolición del Poder Judicial y de los órganos autónomos. Advirtió que la intención de reformar al INE y al TEPJF obedece a un proyecto para “eliminar su autonomía”, ya que ambos habrían sido capturados mediante nombramientos de incondicionales.
“Son golpes de Estado silenciosos. Antes se utilizaban tanques y la fuerza militar en las calles. Ahora, estos personajes se disfrazan de demócratas y ejecutan un plan para hacerse del poder sin rendir cuentas”, dijo. A su juicio, la reforma judicial formó parte de una “venganza” contra los tribunales que cuestionaban decisiones presidenciales. “A partir de hace unos días, el Poder Judicial en México está prácticamente cesado”, afirmó.
El exmandatario sostuvo que los recientes comicios de junio funcionaron como un ensayo de lo que podría repetirse en futuras elecciones: procesos controlados, candidatos designados de antemano y votaciones manipuladas con prácticas clientelistas. “Con mucha tristeza, declaro difunta la democracia mexicana. Tendrá que volver a nacer”, sentenció.
Finalmente, Zedillo consideró que el partido en el poder busca consolidarse como un régimen de partido único, utilizando mecanismos constitucionales para perpetuarse y neutralizar a cualquier contrapeso. “Ese ha sido el proyecto —dijo— y lo están ejecutando a la perfección”.
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