Durante la Cumbre 2025 de la Organización de Cooperación de Shanghai (OCS), los líderes de China, Rusia e India compartieron gestos de cercanía en Tianjin, buscando proyectar una imagen de entendimiento pese a las diferencias que mantienen en diversos frentes.
TIANJIN (Xinhua) — En la ciudad portuaria de Tianjin, el presidente Xi Jinping recibió al primer ministro indio Narendra Modi y al presidente ruso Vladimir Putin. Frente a las cámaras, los tres dirigentes se saludaron con sonrisas y un apretón de manos conjunto, en una escena que buscó transmitir unidad entre potencias con agendas diversas.
El encuentro se produjo al margen de la 25ª Reunión del Consejo de Jefes de Estado de la OCS. Testigos destacaron la espontaneidad con la que Putin sonrió y Modi soltó una carcajada mientras se acercaban a Xi, gesto que contrastó con la formalidad habitual de este tipo de cumbres.
Aunque los tres países mantienen tensiones abiertas, como la disputa fronteriza entre China e India, la foto conjunta buscó enviar un mensaje de entendimiento temporal. Analistas señalaron que este tipo de imágenes públicas forman parte del lenguaje diplomático de las cumbres, donde los gestos adquieren un valor político propio.
Xi abrió la reunión denominada “OCS Plus” subrayando que la organización, integrada por 10 miembros, dos observadores y 14 socios de diálogo, representa a casi la mitad de la población mundial y una cuarta parte de la economía global. Fundada en 2001, la OCS ha evolucionado hasta convertirse en una plataforma de diálogo y concertación entre Asia, Europa y África.
Durante un banquete de bienvenida a los líderes asistentes, Xi destacó que la OCS tiene la responsabilidad de salvaguardar la paz y la estabilidad regional, así como de impulsar el desarrollo de los países miembros en un contexto marcado por incertidumbres globales. El mandatario expresó confianza en que la cumbre adoptará documentos clave, incluida la estrategia de desarrollo para la próxima década.
Acompañado por su esposa Peng Liyuan, Xi dio la bienvenida a más de 20 líderes nacionales y representantes de 10 organizaciones internacionales. Entre los asistentes se encontraron los presidentes de Rusia, Vladimir Putin, y de India, Narendra Modi. El encuentro entre los tres líderes, marcado por sonrisas y gestos de camaradería, fue interpretado por analistas como un mensaje de cercanía política y de construcción de un orden alternativo al de Occidente, mientras India buscaba proyectar autonomía en su política exterior.
Xi enfatizó que Tianjin, como metrópoli abierta e inclusiva, refleja el espíritu de la reforma y apertura de China, y que la organización de la cumbre dotará de nueva vitalidad a la cooperación de la OCS. También subrayó que la organización se ha consolidado como una fuerza importante en la construcción de un nuevo tipo de relaciones internacionales y en la promoción de una comunidad global de futuro compartido.
La agenda de la cumbre incluye la 25ª Reunión del Consejo de Jefes de Estado de la OCS y la reunión “OCS Plus”, en la que se discuten planes de cooperación y gobernanza global. Xi expresó su esperanza de que, bajo la guía del llamado Espíritu de Shanghai, la organización avance hacia un futuro más brillante, aunando fuerzas del Sur Global y promoviendo el progreso de la civilización humana.
Al evento asistieron altos funcionarios chinos como Cai Qi, Wang Yi y Chen Min’er. Tras el banquete, Xi y Peng participaron junto a los invitados en un espectáculo cultural, en el marco de una cumbre que busca proyectar cooperación y unidad más allá de las fronteras regionales.
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