El hijo del ex presidente Andrés Manuel López Obrador visitó Saltillo y se reunió con operadores territoriales de Morena en una propiedad vinculada a antiguos jefes del narcotráfico. Su presencia en el estado marca el inicio de una estrategia electoral de alto control político.
Saltillo,Coah. — La semana pasada, Andy López Beltrán estuvo en Saltillo. Según fuentes locales, el hijo del ex presidente encabezó una reunión con los coordinadores de operación territorial de Morena en los jardines de una casa ubicada al norte de la ciudad. El inmueble pertenece al empresario morenista Gerardo Covarrubias, personaje conocido por mantener relaciones políticas y empresariales controvertidas.
La residencia no es un sitio cualquiera. En años anteriores, habría sido propiedad o refugio de un capo que marcó una de las etapas más violentas en la historia reciente de Coahuila. La finca cuenta con caballerizas y es recordada por haber sido refugio de otro jefe del hampa que mantenía ahí su criadero de caballos, símbolo de poder y lujo en los años del auge criminal.
En ese mismo escenario, testigos observaron a Andy López Beltrán ajustando las piezas de lo que será la operación electoral morenista en el estado. Se dice que “El Heredero” busca casa en renta para permanecer en la región durante las campañas de diputados locales. La imagen de su instalación en Coahuila —desde una residencia con historia criminal— deja una estampa que combina política, poder y sombras del pasado.
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