El gobernador Alejandro Armenta reveló que el Gobierno de Puebla deberá cubrir más de 2 mil millones de pesos derivados de juicios perdidos por contratos de obras inexistentes firmados en sexenios anteriores. Señaló que su administración trabaja para resolver los litigios y exhibir a los responsables de estas irregularidades.
Puebla de Zaragoza, Pue. — Durante una conferencia, el mandatario estatal afirmó que su gobierno recibió una carga financiera considerable producto de decisiones irregulares tomadas por exfuncionarios, quienes —según dijo— “patearon el bote” y dejaron contratos vencidos con sentencias judiciales en firme. “Si no se pagan, el Estado incurre en desacato”, advirtió.
Armenta detalló que existen al menos cuatro contratos ya con resolución judicial que obligan al pago inmediato, además de otros treinta procesos vinculados a obras presuntamente inexistentes o con finiquitos irregulares. Estas acciones, dijo, fueron avaladas en su momento por servidores públicos que autorizaron ampliaciones injustificadas o certificaron obras que nunca se realizaron.
El gobernador enfatizó que su administración busca resolver los litigios “con diálogo y acuerdos”, pero advirtió que se exhibirá públicamente a quienes incurrieron en estas prácticas, las cuales calificó como una forma de daño doble al erario y a la ciudadanía. “No solo afectaron a Puebla, también se beneficiaron de la contratación de obras fantasmas”, señaló.
La actual gestión estatal prepara una revisión integral de los contratos heredados con el fin de determinar responsabilidades administrativas y penales, además de fortalecer los mecanismos de control en la ejecución de obra pública para evitar nuevas irregularidades de este tipo.
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