Una marcha convocada por el Frente Estatal de Universidades por Michoacán para exigir justicia por el asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, derivó en enfrentamientos con la Guardia Civil y la Policía del Estado frente al Palacio de Gobierno en Morelia.
Morelia, Mich. — Alrededor de las 14:00 horas, estudiantes de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo arribaron a la Avenida Madero, donde se encontraron con un cerco metálico y un despliegue de policías que resguardaban el acceso principal al Palacio de Gobierno. La concentración, que había sido convocada con carácter pacífico, se tornó violenta tras un intento de los manifestantes por derribar las vallas de seguridad.
De acuerdo con reportes locales, los uniformados respondieron con el uso de gas lacrimógeno y balas de goma para dispersar a los estudiantes, quienes lanzaron objetos y golpearon las estructuras metálicas en respuesta. En medio de los disturbios, una estudiante resultó herida y otro fue detenido.
Tras ser desalojados del primer cuadro de la ciudad, los manifestantes se dirigieron al Congreso del Estado, seguidos por elementos policiales, donde continuaron la protesta entre empujones y gritos de consignas. La movilización había partido desde dos puntos: el Monumento a Lázaro Cárdenas y el Jardín Morelos —también conocido como “El Caballito”—, con la participación de cientos de jóvenes vestidos de blanco.
Antes de llegar al Palacio de Gobierno, los organizadores habían considerado modificar la ruta para evitar confrontaciones, sin embargo, decidieron avanzar hasta el recinto donde despacha el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla. El enfrentamiento dejó un ambiente de tensión en el centro de Morelia y generó críticas hacia el uso de la fuerza durante una manifestación estudiantil que demandaba justicia y seguridad.
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