Con un multitudinario adiós entre lágrimas y aplausos, el pueblo de Uruapan rindió homenaje a su alcalde asesinado, Carlos Manzo. Su viuda, Grecia Quiroz García, encabezó la ceremonia con un discurso en el que prometió continuar el legado del edil y llamó a la unidad frente a la violencia que sacude a Michoacán.
Ururapan, Mich. — En medio de una jornada marcada por el duelo y la indignación, cientos de ciudadanos se reunieron este domingo para despedir a Carlos Manzo Rodríguez, presidente municipal de Uruapan, asesinado durante una celebración pública del Día de Muertos. El funeral estuvo acompañado por aplausos, lágrimas y gritos de “justicia”, reflejo del aprecio y respeto hacia el edil independiente.
El momento más conmovedor llegó cuando Grecia Quiroz García, viuda de Manzo, tomó la palabra. “No mataron al presidente de Uruapan, mataron al mejor presidente de México, al único que se atrevió a levantar la voz, a debatir y a decir siempre la verdad sin temor a nada”, expresó ante una multitud que respondió con aplausos.
La viuda recordó los orígenes del movimiento ciudadano que impulsó a su esposo a la alcaldía. “Desde que recaudamos firmas y caminamos las calles para pedir apoyo, la gente lo acompañó. Hoy truncan ese camino, pero aunque apagaron su voz, no apagarán esta lucha”, declaró con firmeza, comprometiéndose a mantener viva la causa que su esposo representó.
Durante su discurso, lanzó un llamado a la unidad social ante la creciente inseguridad: “Defendamos a nuestros hijos con uñas y dientes, defendamos nuestro Uruapan, defendamos nuestra patria, porque él hubiera sido el mejor presidente de México”.
Visiblemente conmovida, también dedicó un mensaje a los padres de familia, apelando a la educación y la responsabilidad en tiempos difíciles. “Eduquen a sus hijos, ámenlos, corríjanlos si es necesario. Más vale ir a verlos a la cárcel que llorarles en el panteón”, dijo entre lágrimas.
El homenaje concluyó con una declaración de amor y compromiso: “Te amo, Carlos, y siempre voy a estar para ti. Por nuestros hijos, por ti, por todo lo que soñaste, seguiremos tu legado. Viva Uruapan, viva México, viva Michoacán y viva Carlos Manzo”.
La madre e hijos del edil encabezaron el cortejo fúnebre que recorrió las calles del municipio, acompañado por una multitud vestida de negro. El cuerpo de Carlos Alberto Manzo Rodríguez fue velado en privado bajo un fuerte dispositivo de seguridad en una funeraria sobre la calle Juárez, tras la necropsia de ley realizada por la Fiscalía General del Estado.
Posteriormente, el féretro fue trasladado a la plaza principal —el mismo lugar donde ocurrió el atentado— para recibir un homenaje póstumo. Ahí se celebró una misa en memoria del edil antes de proceder a su sepultura. En palabras de sus allegados: “Su sombrero no cayó; sigue siendo símbolo de esperanza y dignidad para Uruapan”.
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