El recién electo alcalde de Nueva York, Zohran Mamdani, aseguró que su administración estará lista para comenzar el 1 de enero y que trabajará para unir a los ciudadanos más allá de sus diferencias políticas. “No importa cuál sea su posición, todos enfrentamos los mismos problemas”, afirmó.
NY — En su primera entrevista televisiva tras su victoria electoral, Zohran Mamdani anunció que dedicará los próximos 57 días a preparar su gobierno y a cumplir las promesas de su campaña centrada en la asequibilidad y el acceso equitativo a la vivienda y los servicios públicos. “Le debemos a esta ciudad estar listos el 1 de enero para comenzar a cumplir”, declaró el nuevo alcalde, quien busca demostrar que su agenda puede beneficiar a todos los neoyorquinos.
Con apenas 34 años, Mamdani se convertirá en el primer alcalde musulmán de la ciudad, además del primero de ascendencia surasiática, nacido en África y el más joven en ocupar el cargo en más de un siglo. Su triunfo sobre el exgobernador Andrew Cuomo y el republicano Curtis Sliwa fue considerado un hecho histórico que marca un cambio generacional y político en la administración neoyorquina.
El líder socialista democrático reconoció los desafíos que le esperan frente a una Administración Trump hostil y una compleja burocracia local. “Confío en cumplir con las mismas políticas por las que nos postulamos durante el último año”, señaló, reafirmando su compromiso con los principios progresistas que guiaron su campaña.
Mamdani confirmó que no ha recibido comunicación de Cuomo ni del alcalde saliente Eric Adams, aunque sí habló con su excontrincante Sliwa. En tanto, Rich Azzopardi, portavoz de Cuomo, indicó que el exgobernador “dejará que sus discursos hablen con la gracia requerida”.
Durante su discurso de victoria, Mamdani envió un mensaje conciliador pero firme: “Que esta noche sea la última vez que pronuncie su nombre (Cuomo), mientras pasamos la página de una política que abandona a muchos y solo responde a unos pocos”.
El nuevo alcalde también denunció los ataques personales y la intolerancia racial que marcaron la campaña. “Estoy bastante decepcionado por la naturaleza de la intolerancia y el racismo que vimos en las últimas semanas”, dijo, refiriéndose a los millones de dólares invertidos en anuncios que apelaban a estereotipos islamofóbicos. Su victoria, añadió, representa “una oportunidad para que Nueva York vuelva a ser ejemplo de diversidad, dignidad y justicia social”.
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