La confianza empresarial en Puebla se encuentra en uno de sus momentos más bajos en años. La caída del 19% en las exportaciones durante el primer trimestre de 2025, confirmada por el INEGI, se refleja directamente en las expectativas de los empresarios, quienes hoy reportan un Indicador Global de Opinión Empresarial de Confianza (IGOEC) estimado en apenas 46 puntos.

Puebla de Zaragoza, Pue.- La confianza del empresariado poblano, está por debajo del promedio nacional de 48.7 puntos y manteniéndose por debajo del umbral de los 50 puntos.

Esta caída en la confianza es resultado de un entorno de incertidumbre en la entidad, donde miles de empleos se encuentran en riesgo ante la crisis exportadora y el nulo apoyo estatal al sector en los primeros seis meses de la administración de Alejandro Armenta. Las declaraciones de convertir a Puebla en la “capital de la electromovilidad” no han logrado traducirse en un alivio para las empresas que enfrentan menores pedidos, costos crecientes y un entorno incierto.

Puebla enfrenta una vulnerabilidad estructural por su dependencia del sector automotriz, con el 81.8% de las exportaciones concentradas en equipo de transporte. Empresas como Volkswagen y Audi han resentido la desaceleración, agravada por tensiones comerciales con Estados Unidos, mientras que el mercado interno no logra compensar la falta de dinamismo exportador.

La caída de exportaciones desde los 4,647.8 millones de dólares en 2023 a 3,360.2 millones en 2025 no es solo una cifra de coyuntura: es un reflejo de un mercado que pierde vigor, impactando el nivel de confianza de los empresarios que ven cada vez más lejanas las condiciones para invertir y crecer.

Evolución del IGOEC y Confianza Empresarial en Puebla

En este contexto, la confianza empresarial deprimida en Puebla significa menos inversión, menor contratación de personal y una reducción en la actividad productiva, agravando el círculo vicioso de la caída exportadora y, como consecuencia, del PIB estatal.

Las expectativas de los empresarios locales reflejan un pesimismo creciente, conscientes de que las promesas de proyectos difícilmente aliviarán en el corto plazo las tensiones de un mercado que se contrae.

El reto inmediato para Puebla no es menor: reconstruir la confianza empresarial, diversificar la estructura productiva y resolver la crisis exportadora que amenaza con arrastrar al conjunto de la economía estatal a un periodo de bajo crecimiento con alto costo social.

Fuente: Encuesta Mensual de Opinión Empresarial (EMOE), Serie 2018, junio 2025, INEGI. Estimaciones: Mexconomy.