En la comunidad de Cuaxicala, municipio de Huauchinango, un derrame de hidrocarburo de Pemex fluye como un riachuleo que brota del suelo en un camino de terracería desde el 23 de agosto, contaminando agua y suelos, sin presencia ni pronunciamiento de autoridades municipales o estatales.
Huauchinango, Pue. — La Sierra Norte de Puebla enfrenta una emergencia ambiental que puede ser de alcance regional tras la fuga de crudo que permanece fuera de control en Cuaxicala. Habitantes denunciaron que el derrame, originado en una estación de bombeo de Petróleos Mexicanos, ha alcanzado arroyos y caminos rurales, extendiendo sus efectos contaminantes sin que se presenten acciones contundentes de la empresa o de las autoridades.
De acuerdo con los vecinos y la evidencia en video, el crudo corre como un riachuelo constante improvisado sobre la tierra, impregnando el camino y fluyendo hacia cuerpos de agua cercanos. Solo una cuadrilla de trabajadores de Pemex acudió al lugar, pero no logró contener el derrame. El hidrocarburo continúa dispersándose, agravando los riesgos ambientales y sanitarios.
A la preocupación por la contaminación se suma el hecho de que ni el gobierno municipal de Huauchinango ni las instancias estatales se han hecho presentes en la zona ni emitido posicionamiento alguno. Esta ausencia institucional ha incrementado la indignación entre los habitantes, quienes señalan que la falta de respuesta oficial prolonga la vulnerabilidad de la comunidad.
Los pobladores recuerdan que la región ha padecido incidentes similares en el pasado, con trabajos de remediación incompletos por parte de Pemex. Hoy, exigen con urgencia una intervención que frene el avance de la contaminación y garantice un saneamiento efectivo de los suelos y cuerpos de agua de la Sierra Norte.
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