El regiomontano Raúl Rocha Cantú, empresario y dueño de Miss Universo, pactó con la FGR convertirse en testigo colaborador tras ser acusado de tráfico de drogas, armas e hidrocarburos entre Guatemala y México, evitando así su captura y proceso penal.
CDMX — Rocha Cantú solicitó un criterio de oportunidad antes de ser detenido, con lo que se comprometió a entregar información relevante a las autoridades a cambio de inmunidad judicial. La Fiscalía lo identifica como uno de los líderes de una red criminal dedicada al contrabando de combustible que cruza en lanchas por el río Usumacinta y se traslada en pipas desde Chiapas y Tabasco hasta Querétaro.
Según la indagatoria, el grupo habría sobornado a funcionarios de la propia Fiscalía para conocer avances de las investigaciones en su contra. Entre las personas señaladas figura la fiscal Mari Carmen Ramírez Rodríguez, quien ya fue detenida por supuesta filtración de información desde la FEMDO.
Desde la conferencia presidencial, la mandataria Claudia Sheinbaum afirmó que será la FGR quien deba informar sobre el caso y subrayó que la investigación no debe asociarse con Fátima Bosch, la mexicana ganadora del certamen en Tailandia. “Quieren restarle mérito, y no corresponde”, declaró.
La carpeta indica que la red de Rocha también traficaba armas hacia grupos criminales como el Cártel de Jalisco Nueva Generación en Querétaro y La Unión Tepito en Ciudad de México. El empresario, además, funge como cónsul honorario de Guatemala en México desde 2022.
La investigación se inició el 29 de noviembre de 2024 tras una denuncia anónima. La agente federal Yazmín Mayoral Marín solicitó una orden de captura en agosto pasado por delincuencia organizada, pero el proceso se detuvo por disputas de competencia judicial entre Almoloya y Querétaro. Mientras tanto, Rocha negoció entregarse como testigo protegido.
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