Estudiantes del Instituto Tecnológico Superior de los Ríos (ITSR) mantienen desde hace más de un mes una manifestación pacífica en demanda de la destitución del director Iván Arturo Pérez Martínez, a quien acusan de nepotismo, acoso sexual y abuso de poder.

Balancán, Tabasco — Este martes, la protesta fue disuelta por fuerzas antimotines y elementos de la Guardia Nacional, mediante el uso de gas lacrimógeno.

La intervención, calificada por estudiantes y padres de familia como “represiva”, dejó varios lesionados y generó una oleada de indignación en redes sociales y entre organizaciones locales de derechos humanos. Los inconformes denunciaron la actuación de la Fuerza Interinstitucional de Reacción Táctica "Olmeca", grupo que presuntamente encabezó el operativo de desalojo.

Testimonios recabados en el sitio señalan que personal uniformado agredió verbal y físicamente a manifestantes, incluidos padres de familia y docentes que acompañaban el plantón. “No pedimos otra cosa que se respete nuestro derecho a expresar lo que está mal en la institución”, declaró uno de los voceros del movimiento.

Frente a la escalada de tensión, el secretario de Gobernación de Tabasco Ramiro López Obrador declaró que se nombrará un director provisional mientras se realiza una auditoría al ITSR. “No protegemos a nadie que esté al margen de la ley”, aseguró, e insistió en que no existe encubrimiento hacia el actual director.

La Secretaría de Gobierno de Tabasco (SEGOTAB) informó que el conflicto escaló luego de que maestros sindicalizados incumplieran un acuerdo previo para reabrir el plantel, condicionando la reapertura a la realización de una auditoría independiente.

Tras la represión, el movimiento estudiantil continúa exigiendo justicia, transparencia y garantías para una vida académica libre de acoso y represión. Las autoridades locales no han anunciado investigaciones sobre el uso de la fuerza durante el operativo.