Familiares, amigos y compañeros darán este viernes el último adiós a Stephany, una joven de 19 años integrante de la Guardia Nacional, quien perdió la vida al interior del Batallón 51 de la corporación en Acapulco, Guerrero. Su familia pidió respeto a su memoria y exigió el esclarecimiento del caso.

Ajalpan, Pue. — El cuerpo de la joven, conocida cariñosamente como Fanny, llegó este jueves a su domicilio en San José Buena Vista, municipio de Ajalpan, Puebla, donde fue recibido entre confeti blanco, llanto y consternación. Decenas de personas se congregaron para despedirse de la oficial, quien apenas llevaba dos meses incorporada a la Guardia Nacional.

Durante la velación, compañeros de la corporación montaron guardia de honor junto al féretro, rodeado de flores, fotografías y parte del equipo táctico que Fanny utilizaba en servicio. Este viernes se oficiará una misa de cuerpo presente antes de su sepultura.

La familia, visiblemente afectada, pidió respeto a su dolor y solicitó esperar los resultados de las investigaciones antes de emitir juicios, luego de que en redes sociales circulara información no confirmada sobre su fallecimiento. Insistieron en que lo único que desean es conocer la verdad y que se haga justicia.

Amigos y conocidos recordaron a Stephany como una joven alegre, llena de sueños y con un profundo deseo de superación. Aseguran que se sentía orgullosa de servir a su país, y lamentan que su vida haya sido truncada de manera tan prematura. Fuentes extraoficiales señalan que el presunto responsable sería un compañero de la misma corporación, lo que mantiene viva la exigencia de justicia.

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