La iniciativa ciudadana “Salvemos la Democracia”, encabezada por Claudio X. González, entregó más de 188 mil firmas para impulsar una contrarreforma electoral frente al proyecto que prepara el gobierno federal. El documento ya fue recibido en la Cámara de Diputados y será enviado al INE para su validación, en medio de acusaciones de concentración de poder y anuncios de movilización social.
CDMX — El frente opositor articulado en torno a la iniciativa Salvemos la Democracia dio un paso formal en el terreno legislativo al presentar un documento de cinco puntos en materia electoral respaldado por 188 mil 358 firmas ciudadanas, cifra que supera en 45 por ciento el mínimo exigido por la ley. El movimiento busca colocarse como contrapeso directo a la reforma electoral que elabora la comisión impulsada por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.
El empresario Claudio X. González afirmó que la iniciativa responde a lo que calificó como una amenaza autoritaria derivada de la concentración de poder en el gobierno federal y en Morena. Sostuvo que el objetivo central es defender el voto libre y evitar cambios que, a su juicio, debiliten el sistema electoral. También destacó que la campaña permitió reactivar a sectores ciudadanos que, dijo, habían permanecido al margen de la participación política.
El movimiento anunció que a partir del inicio del próximo año intensificará movilizaciones públicas para evitar que la propuesta sea enviada a la congeladora legislativa, destino que, recordaron, han tenido otras iniciativas ciudadanas en el pasado. La presión social será, según sus voceros, un componente central de la estrategia.
Durante la presentación, González subrayó el respaldo de jóvenes, un segmento tradicionalmente abstencionista y disputado por los partidos de oposición, en particular PAN y Movimiento Ciudadano. En ese contexto, aludió a la marcha de la llamada Generación Z del 20 de noviembre, que buscó movilizar a la juventud contra el gobierno y Morena, aunque sin una convocatoria masiva.
La puesta en escena retomó símbolos conocidos. Los presentadores, en su mayoría jóvenes, vistieron playeras rosas, en clara referencia a la Marea Rosa, el movimiento opositor que defendió al INE durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador. Esa misma red de organizaciones —Somos México, Sí por México, Unid@s, Sociedad Civil México y Ciudadanos por México— arropó la iniciativa.
Los organizadores relataron experiencias recogidas en más de 200 firmatones realizados en plazas públicas del país, donde, aseguraron, escucharon inconformidades de ciudadanos comunes. Un estudiante de la UNAM, de 20 años, denunció obstáculos políticos por parte de autoridades universitarias para recabar firmas, mientras González habló de un clima de miedo y censura. Otra joven advirtió sobre el riesgo de que Morena concentre el poder como partido hegemónico.
La iniciativa fue recibida por la presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Kenia López Rabadán, quien confirmó que el expediente será enviado al Instituto Nacional Electoral para la verificación de firmas. Una vez validado el respaldo ciudadano, el proyecto podrá iniciar su ruta legislativa y colocarse formalmente en la agenda del Congreso.
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